Aquellos profesionales que son expertos en legislaciones, ordenanzas, estatutos, códigos jurídicos, entre otros conocimientos, se les conoce como abogados. En Zaragoza son profesionales con dominio de filosofía, cultura, comunicación, política y sociología, entre otras disciplinas para asegurar el éxito en su oficio.
Los defensores representan, asesoran o gestionan trámites a organismos privados y públicos, así como a personas naturales y jurídicas. Sin importar a quién o qué ente presten el servicio, los abogados en Zaragoza realizan su trabajo excelente prestando especial atención a los detalles de cada caso que analizan con el fin de darle la solución adecuada a sus clientes.
Especializaciones y valores del profesional
Los abogados trabajan más ciertos casos que otros, por lo cual la mayoría de los profesionales zaragozanos terminan estudiando algún máster en pro de ofrecer un mejor servicio a sus clientes. Entre las especializaciones en el área legislativa se encuentran: mercantil, civil, administrativo, financiero, comercial, laboral, familiar, penal, entre otros. A más conocimientos de las áreas, mayor facilidad para resolver los diferentes casos.
Por otro lado, los defensores que viven el territorio de Zaragoza se destacan también por el prevalecimiento de valores como honestidad, respeto, secreto profesional en su desempeño profesional. Si bien estos parten de la ética profesional, no siempre son tan palpables y comunes en la profesión.
Avales al día garantizan mejor servicio
Para defender, representar o asesorar a cualquier cliente es necesario que los abogados posean una serie de documentos denominados avales que garantizan la veracidad de su formación profesional, el conocimiento de las normas deontológicas (éticas) del ejercicio y la responsabilidad que conlleva trabajar con los clientes.
El aval de formación certifica que el defensor realizó sus estudios superiores y que por ende posee la licencia en leyes o derecho. La garantía de normas de trabajo se rige por un conjunto de normas y valores basados en los códigos deontológicos que rezan cómo debería ser la actuación de estos profesionales en el campo laboral.
Finalmente, el aval o garantía de compromiso exige al abogado a que contrate una póliza de responsabilidad civil para garantizar el reparo de daños a los clientes en caso de negligencia.
La mayoría de los despachos en Zaragoza exigen estos documentos a sus abogados y a su vez les hacen un seguimiento con el fin de constatar si es cierto o no lo que reseñan los documentos.
